CARGAS Y DESCARGAS EN LOS VELEROS



CARGAS Y DESCARGAS VELEROS:
Los últimos Veleros del Mediterrane
  ( José Huertas Morión )

 En los tiempos en que tratamos, quitando los veleros de gran porte que iban a América o Extremo Oriente, los cuales el sueldo era por meses ganado 24 duros por mes, el resto de la navegación velera se iba a la parte por decirlo mejor, ganancias o pérdidas. Esto tenía sus usos y costumbres que se prestaban al abuso incluso al robo sobre los beneficios que pudiera tocar a los tripulantes.

Un barco, en puerto y arranchado y con la bodega vacía y en condiciones de admitir carga, la buscaban por mediación de su consignatario, y una vez encontrado un flete, empezaba la carga de la mercancía. El flete podía ser bordo a bordo, o borda a borda, o muelle a muelle, lo cual significaba que el flete se pagaba con la mercancía puesta a bordo, o colocada en el muelle. En el primer caso el buque, y su tripulación, nada tenía que ver con la estiba de la mercancía; ésta la tenían que poner o sacar personal de tierra, ajeno al barco.

    Aquí es donde se engañaba a la tripulación, haciéndoles hacer un trabajo que previamente tenían que contratar en tierra; repartiéndose en beneficio el consignatario y el mando del buque. Como los marineros eran analfabetos, el engaño era más que posible y las liquidaciones eran mermadas. Si el viaje era afortunado y con vientos favorables las posibilidades de una buena liquidación aumentaban; pero también disminuían con los contratiempos.

    En Barcelona, el muelle de España y de la Muralla, eran muelles de atraque de los veleros, y había tantos,
 que a veces se colocaban en tres y cuatro andanas costado contra costado, y se armaba un lío entre tantas vergas cruzadas unas contra otras.Tantos eran los barcos que se encontraban para cargar en turno para carga y descarga que se desenvergaba el aparejo y las velas y se guardaban en el pañol, porque la estancia podía durar 20 días o un mes.