Atrás quedaron otros, tiempos en que la quilla araba la redondez de la tierra; otras tripulaciones, mudas en sus relatos de las que cuelgan historias de incendios, fantasmas, vías de agua, incluso que fue hallado al garete en mitad del Mediterraneo, abandonado después de un motín y con la sangre de las víctimas, saliendo aún por sus falucheras.
25 Años anduvo marineando sin motores de navegación y sin luz, con sus únicas velas que lo sacaran de las calmas chichas, grandes temporales y acantilados; con una dotación menos adiestrada y mas reducida.
El Galatea guarda en su sentinas todos esos episodios que quizá nunca serán narrados.
Conocemos dos grandes temporales en el periodo Galatea; uno en 1.946 en las Azores con vientos de 175 Km/h del que quedó totalmente desarbolado y con una escora de 42 grados y otro en 1.954 regresando de New York.
De sus derrotas anteriores en la Marina Inglesa se sabe que pasó 16 veces por Cabo de Hornos , haciendo en total 15 viajes.
La época Italiana está poco documentada.